jueves, 31 de enero de 2013

La alianza del PAN con el PRD en Baja California, parte I

El pasado Viernes 25 de Enero, la Comisión Política Nacional del Partido de la Revolución Democrática, aprobó por mayoría (12 votos a favor, 2 en contra, 1 abstención) realizar una alianza entre esta organización política y el Partido Acción Nacional para las elecciones locales en Baja California que se llevarán a cabo el 7 de Julio de 2013. El 31 de Enero, a las 11:50 de la noche, 10 minutos antes del plazo fatal, se firmó la Alianza "Unidos por Baja California" entre el PAN, el PRD, el Partido Nueva Alianza y el Partido de Baja California. Los comentarios que reprueban la alianza entre estos partidos, aunque muchos, suelen repetirse y reducirse a un par de preguntas fundamentales ¿Como es posible que se alíe la izquierda con la derecha? ¿Como se puede aliar el principal partido de izquierda de México, el PRD, con el partido en el poder en Baja California desde hace 24 años, el PAN? Aunque hay que reconocer que dichas preguntas son polémicas y tienen un rechazo implícito a la alianza PAN-PRD, en el resto del mundo, por el contrario, las coaliciones entre partidos de derechas y de izquierdas son más frecuentes de lo que se pudiera pensar.

En México, la primera alianza entre estos 2 partidos se dio en el estado de San Luis Potosí en 1991, llevando como candidato común al Médico Cirujano Salvador Nava, reconocido luchador social en su estado. Aunque los resultados oficiales dieron como ganador al priísta Fausto Zapata, el Dr. Nava impugnó las elecciones alegando fraude electoral, lo que dio como resultado la renuncia del Gobernador Zapata a tan solo unos meses de haber tomado el cargo. De ahí en adelante, las alianzas entre el PAN y el PRD han ocurrido en diversos estados, como Nayarit en 1999, Chiapas en el año 2000 o Chihuahua en 2004 (las dos primeras fueron alianzas ganadoras). En todas esas coaliciones, tanto el PAN como el PRD eran partidos de oposición que se enfrentaban a un PRI que desde su fundación en 1929 había gobernado en esas entidades. Los miembros más recalcitrantes de esos partidos, aunque renuentes, aceptaban a regañadientes las alianzas entre la derecha y la izquierda ya que era primordial alcanzar la alternancia para avanzar en la democratización de sus estados. Sin embargo, a partir de los polémicos comicios presidenciales del año 2006, en los que el candidato del PRD a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, acusó al Partido Acción Nacional de realizar un fraude electoral en su contra como los que hacía el PRI, se comenzó a ver de manera negativa que el PRD buscara alianzas con el PAN en las elecciones locales, cuando hace apenas 2 años se habían realizado coaliciones entre ambos partidos en Oaxaca y Chihuahua.

Cuando en 2010 se efectuaron nuevamente alianzas electorales entre el PRD y el Partido Acción Nacional muchas críticas negativas se lanzaron contra las mismas; las provenientes de la izquierda giraban en torno a que como era posible que el partido que había sido víctima de un fraude se aliara con su verdugo. Sin embargo, estas críticas ignoraban algo importante: las razones por las cuales se habían aliado el PAN y el PRD en San Luis Potosí en 1992 o en Nayarit en 1999 seguían (y siguen) vigentes en más de un tercio de las entidades federativas de México que solamente han sido gobernados por el PRI y sus partidos antecedentes (PNR y PRM) desde 1929. Por lo tanto, los argumentos (alternancia para empezar la transición a la democracia en estados que solamente han sido gobernados por el PRI) a favor de una alianza PAN-PRD en Chihuahua en 2004 mantenían su fuerza para defender la alianza entre ambos partidos en Sinaloa en 2010, a pesar de lo sucedido en la elección presidencial de 2006.

Hago referencia a las alianzas pasadas en México para contestar a la primera cuestión "¿Como es posible que se alíe la izquierda con la derecha?" con el ánimo de demostrar que las alianzas entre partidos de ideologías diferenciadas son muy posibles. En el resto del mundo, partidos, movimientos e incluso ejércitos de derechas y de izquierdas se han unido en distintos momentos de la historia: los nacionalistas de derecha del Kuomintang se unieron a los comunistas liderados por Mao Zedong para enfrentar a los japoneses durante la II Guerra Mundial y defender la Independencia de China; el Partido Socialista y el Partido Demócrata Cristiano de Chile se aliaron para expulsar al dictador Augusto Pinochet de la Presidencia y, desde 1990 hasta el año 2010, gobernaron en coalición ese país sudamericano, convirtiéndolo en 20 años en la nación latinoamericana con el más alto Índice de Desarrollo Humano, y desde Junio de 2012, en Grecia gobierna la alianza conformada por los conservadores de Nueva Mayoría, los socialdemócratas del "PASOK" y los progresistas de "DIMAR". Tan solo estos tres ejemplos entre muchos otros son suficientes para demostrar que las alianzas entre fuerzas de izquierdas y de derechas muchas veces pueden ser beneficiosas para la población (aunque también pueden ser desastrosas). Pero, ¿Como es posible unir dos ideologías contrapuestas en una alianza?

El término "izquierda" y "derecha" en realidad es inexacto. En Europa suelen decir "izquierdas y derechas", ya que hay un sinnúmero de ideologías que se pueden clasificar como "de izquierda" al igual que "de derecha". Por ejemplo, los democristianos, los cuales aunque son conservadores en lo social (están en contra del matrimonio gay, despenalizar el aborto, etc) si están a favor del Estado de Bienestar, el cual ha sido la bandera histórica de los socialdemócratas. De igual manera, los liberales, al estar en contra de la intervención del Estado tanto en la economía como en los asuntos privados, pueden tener coincidencias con los progresistas, quienes están a favor del intervencionismo gubernamental en la esfera económica pero rechazan de manera tajante que el Estado se inmiscuya en las cuestiones individuales (como los liberales). El abanico de coincidencias entre ideologías de izquierdas y derechas es tan amplio, que incluso las más extremistas en su campo, el marxismo-leninismo (izquierda) y el fascismo (derecha), coinciden en la idea de que es mejor una sociedad gobernada por un solo partido que por el pluralismo de partidos.

En resumen, las izquierdas y las derechas pueden coaligarse dejando de lado sus diferencias buscando objetivos superiores que vuelva necesaria su alianza, como superar un régimen autoritario e implantar la democracia en la sociedad. Sin embargo, queda pendiente la pregunta ¿Como se puede aliar el principal partido de izquierda de México, el PRD, con el partido en el poder en Baja California desde hace 24 años, el PAN? Eso lo dejaremos para la siguiente entrada.